Reflexología Podal
La reflexología podal se basa en el masaje y la presión de ciertos puntos en los pies. Esta técnica milenaria proveniente de la antigua China e India se basa en el principio de que todos los órganos, glándulas y sistemas del cuerpo humano están reflejados en los pies. Por lo que su estimulación con masaje y presiones incide directamente en la salud de todo nuestro cuerpo. Así, se refleja en ellos cualquier alteración o desequilibrio que se produce en el organismo, tratando la totalidad del cuerpo desde los pies.
Se trata de una técnica manual que se realiza aplicando presiones y fricciones sobre unos puntos precisos del pie, con el objetivo de actuar de forma refleja sobre los órganos, articulaciones, glándulas y sistemas del cuerpo. Ayuda a estimular las funciones orgánicas, contribuyendo a prevenir patologías y restablecer la salud, aumentando la capacidad de autocuración y regeneración del propio cuerpo.
Tiene como objetivo detectar alteraciones y la parte del organismo que las produce, mediante la exploración detallada del pie. Otra finalidad es la de promover la homeostasis del cuerpo, es decir, un estado de equilibrio fisiológico.
Los puntos reflejos se trabajan normalmente con el dedo pulgar o nudillo, también se usan bastones especiales para este tipo de masaje. Durante el tratamiento se da mucha importancia a las vías de eliminación del cuerpo, ya que tener el cuerpo lo más liberado de toxinas posible predispone a que el organismo tenga una mejor recepción ante los estímulos que se van a realizar. Se trabajan también los sistemas relacionados con el motivo de visita, como pueden ser el sistema nervioso, endocrino, genito-renal, digestivo o linfático.
Algunos de sus beneficios: