➡️ Si discutes frecuentemente con tu pareja.

➡️ Si te resulta difícil expresarte y te sueles poner nervioso.

➡️ Si te afectan mucho sus comentarios y acusaciones.

➡️ Si quieres sentirte respetado. 

Una de las cosas más frustrantes es no poder entenderse bien con la pareja. Lo que sientes es una mezcla de rabia, tristeza e impotencia. Por tu cabeza pasan innumerables pensamientos del tipo:

◼️ "Es imposible decir que NO de manera amable."

◼️ "Mi opinión no es tan importante como la suya."

◼️ "Tengo que complacerle siempre para que me quiera."

◼️ "No me valorará si no estoy de acuerdo con lo que dice."

o bien:

◼️ "Es infantil expresar los sentimientos."

◼️ "No consigo cambiar a mi pareja."

◼️ "Si me muestro vulnerable o inseguro se aprovecharán de mí."

◼️ "Mi forma de pensar es la correcta, por eso debo imponer mi opinión."


El objetivo de la comunicación es trasmitir al otro aquello que pensamos o sentimos. Para ello, es necesario que la otra persona nos preste atención, comprenda lo que decimos, valore el mensaje y nos dé respuesta. En caso de no ser así, la comunicación va a ser mala o nula.

Cada cosa que queremos comunicar implica dos aspectos: qué decimos y cómo lo decimos.

Errores frecuentes durante la comunicación en pareja:

❗ - Hablar sin escuchar al otro y no dejar hablar a la otra persona.

❗ - Utilizar insultos y amenazas. Gritar.

❗ - Decir algo "en caliente" de lo que más tarde te puedas arrepentir.

❗ - Dejar pasar demasiado tiempo para expresar algo que te ha molestado o con lo que no estás de acuerdo.

❗ - Discutir delante de otras personas; dejar en evidencia a tu pareja delante de otros.

❗ - No ir al grano y dar demasiados rodeos al hablar.

❗ - Criticar todo lo que crees que hace mal el otro, sin mencionar nada positivo ni proponer ninguna solución.


Consejos para mejorar tu comunicación:


✔️ ASERTIVIDAD - Consiste en comunicar defendiendo los derechos e intereses personales (y a la vez respetando los derechos e intereses del otro), tratando de ser objetivo, racional y respetuoso con el otro. Es la habilidad para saber qué hacer, qué decir y cómo decirlo.

Respetar al otro es imprescindible para que pueda haber una buena comunicación. De igual forma, es importante que defiendas tu turno de palabra y tiempo para hablar, con firmeza y seguridad.

Expresa tus emociones sin herir los sentimientos de tu pareja. Es sano que tengas tu propia opinión sobre cualquier tema o circunstancia, y la expreses sin ofender intencionadamente al otro. Recuerda que si quieres ser respetado, debes también respetar la opinión de otros.

Exprésate con claridad, proporcionando la información necesaria para ser entendido. Asegúrate de haber sido entendido o de haber entendido al otro.

No dudes en cambiar de opinión las veces que consideres necesario, tienes derecho a equivocarte y rectificar.

✔️ EMPATÍA - Es la capacidad de entender cómo piensa o siente la otra persona, sin estar necesariamente de acuerdo con ella. Situarse en el lugar del otro también ayuda a comunicarse mejor.

Para desarrollar la empatía es imprescindible saber escuchar. En general, en las relaciones se escucha poco y mal. Algunas veces por el deseo incontenible de protagonismo en la conversación, lo que impulsa a quitar la palabra al otro.

De esta forma, es posible que cada una de las partes trate de defenderse o imponer sus ideas. Por este motivo el diálogo se hace imposible cuando no se escucha.

Dedicar tiempo a escuchar no consiste solamente en estar callado, sino que además se trata de estar pendiente de lo que dice la otra persona, es decir, escuchar con atención. Trata de escuchar objetivamente, evitando juicios de valor precipitados.


✔️ CRÍTICAS CONSTRUCTIVAS - Quejarse de algo puede ser una actitud constructiva para una relación saludable de pareja; es necesario para que el otro sepa aquello que no funciona o no está correcto.

Es importante expresar la queja sin atacar a tu pareja, ya que sino es posible que tienda a defenderse, a justificarse y a contraatacar. De esta forma, la conversación tiene pocas probabilidades de terminar en cambios positivos. Asimismo es importante elogiar frecuentemente y reconocer lo bueno de la otra persona.

Cuida la forma en que expresas la queja: siempre en privado (en presencia de nadie más) y evita la ironía porque lo podría considerar como menosprecio o burla.

Expresa a poder ser, una sola crítica a la vez. No esperes a que las quejas se acumulen y trata de expresarlas al momento sin dejar pasar demasiado tiempo.

Evita las palabras "siempre, nunca, otra vez": son generalizaciones que exageran la realidad. Habla de cómo te sientes tú con respecto a la situación, de tus sentimientos y cómo te afecta tal cosa. Evita el "tú haces esto o aquello", señalando al otro con el dedo acusador.

No saques trapos sucios del pasado, resulta muy desagradable e indica que no confías en la otra persona y en su capacidad para evolucionar. En lugar de eso haz comentarios constructivos que motiven y animen al otro a mejorar en algo concreto. Se trata de ayudar al otro a ser consciente de su error y de las ventajas que tendría cambiando algo puntual. De todas formas, no podemos obligar a cambiar a nadie, por lo que debemos respetar siempre la voluntad del otro.

➡️ Conocerte en profundidad, tanto a ti como a tu pareja, puede ser de utilidad. Os ayudará a comprender vuestra forma de ser y a respetar la particularidad de cada uno. Saber cuáles son vuestros valores y características específicas de personalidad os permitirá comunicaros mejor. También te recomiendo utilizar técnicas de gestión emocional en momentos determinados como la 👉 Kinesiología y el 👉 EFT Tapping.

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