¿Sufres dolores de espalda? ¿Quieres saber qué tipos de contracturas musculares hay, cuáles son sus causas y cómo tratarlas?

Las contracturas musculares o "nudos" son contracciones continuadas e involuntarias de un músculo y sus fibras, causando dolor y una alteración de su funcionamiento habitual. Esto impide que la sangre llegue a las células del músculo, provocando que se acumulen toxinas en éste y que sus terminaciones nerviosas envíen señales de dolor al cerebro.

Muchas veces las contracturas son palpables a través de la piel como si fueran bultos o zonas endurecidas. A veces el dolor se puede irradiar hacia otra zona, producir dolores de cabeza, mareos, hormigueos o sensación de adormecimiento en extremidades.

Existen 4 tipos de contracturas:

1- Mecánicas: producidas por un esfuerzo físico, malas posturas o movimientos repetitivos.
2- Defensivas: causadas por patologías diversas como puede ser la desviación de columna (escoliosis), hernia, protusión discal o pinzamiento.
3- Térmicas: se originan debido a cambios bruscos de temperatura como golpes de aire.
4- Emocionales: la mayoría de contracturas suelen ser de carácter emocional, nuestras emociones provocan tensiones en distintas zonas del cuerpo y nuestra postura corporal nos refleja de qué manera nos sentimos por dentro. El estrés continuado, conflictos de pareja o problemas en el trabajo, son las situaciones más habituales que inconscientemente nos causan dolores de espalda. Solemos encorvar la espalda, encoger los hombros, tensionar la musculatura...lo que a la larga producirá dolores crónicos de espalda.

Sea cual sea el origen del dolor, existen distintas técnicas que consiguen relajar la musculatura, reducir los niveles de estrés y ayudar a equilibrar emocionalmente a la persona:


➡️ Quiromasaje: todo el mundo puede hacer un masaje pero no cualquiera sabe dar un buen masaje terapéutico, ya que es una terapia que se estudia y requiere del conocimiento de diferentes manipulaciones. Es necesario mucha práctica y experiencia, así como tener la habilidad o sensibilidad para ello. Tiene su efecto más inmediato sobre la piel, el sistema nervioso, el sistema circulatorio y el sistema músculo-esquelético. Alivia contracturas y dolores musculares, mejora la circulación sanguínea y produce un efecto relajante sobre el sistema nervioso. El quiromasaje combinado con otras técnicas como la 👉Cromoterapia y el 👉Reiki, ayuda a potenciar sus beneficios. 👉Para conocer más sobre el Quiromasaje

➡️ Shiatsu: es una terapia japonesa en general poco conocida en España y Europa. En Japón son estudios regulados por el Ministerio de Salud y tienen una duración de 3 años. Esta terapia logra incidir en la musculatura más profunda mediante presiones con los dedos y reeduca la postura corporal, por lo que en algunos casos resulta ser más efectiva que el quiromasaje. También tiene en cuenta los meridianos energéticos y puntos de acupuntura para reestablecer el equilibrio energético del cuerpo. El shiatsu estimula el organismo a niveles profundos y hace emerger el cansancio y las tensiones acumuladas, por eso es frecuente tras la sesión sentirse cansado y con reacciones emocionales. Estos efectos suelen durar 1 o 2 días como máximo y sería lo equivalente a una crisis curativa; pasado este tiempo la sensación es de alivio y mayor vitalidad. 👉Para conocer más sobre el Shiatsu

➡️ Reflexología: aunque aparentemente pueda parecer que esta terapia no tenga nada que ver con el dolor de espalda, lo cierto es que en nuestros pies, manos y rostro se encuentran reflejados todos los órganos y sistemas de nuestro cuerpo, incluida nuestra espalda y vértebras cervicales, dorsales y lumbares. Ejerciendo masaje y presión en ciertos puntos, se consigue estimular la zona a tratar, aliviando de esta forma el dolor y la tensión en ella. Esta técnica milenaria se practica ya en todo el mundo con resultados óptimos para la salud, así como también como complemento a otras terapias. 👉Para conocer más sobre la Reflexología Podal 

➡️ Reiki: como hemos visto, puede ser empleado como complemento de otras terapias para facilitar el alivio del dolor. Asimismo funciona especialmente bien cuando la causa del dolor de espalda es emocional. Es en estos casos cuando el Reiki ayuda a desbloquear y equilibrar las emociones que provocan tensión y estrés. Facilita el equilibrio mental y emocional, reduce el nerviosismo, ansiedad, insomnio, depresión y tristeza. También trata desequilibrios en la parte energética del cuerpo, regulando y equilibrando los chakras. 👉Para conocer más sobre el Reiki

➡️ EFT Tapping: técnica por excelencia de liberación emocional, es una de las más conocidas y usadas para equilibrar emociones, pensamientos negativos e incluso dolores físicos de origen psico-emocional. De nuevo esta terapia es adecuada para casos en los que el dolor de espalda tiene un origen emocional. Ha sido descrita como la ‘acupuntura para las emociones sin agujas’. Tiene sus raíces en la antigua medicina china y consiste en dar golpecitos suaves con los dedos sobre los puntos asociados a cada uno de los meridianos energéticos. Se consigue desbloquear la energía vital estancada, liberando emociones negativas, creencias limitantes y desajustes físicos. 👉Para conocer más sobre el EFT Tapping

➡️ Kinesiología: esta terapia contempla el ser humano de forma global, es decir, desde una visión física, química, emocional, psicológica, energética y sutil. Por lo que trata el dolor de espalda desde todas estas áreas del ser humano. Mediante un testaje muscular es el cuerpo de la persona el que "dirige" la sesión, en la que se realizan diferentes correcciones para lograr el bienestar. Es una de las terapias más completas que existen, ya que permite reprogramar el cuerpo y mente, desbloquear creencias limitantes, patrones de conducta y hábitos nocivos, entre otros beneficios. Gracias a la kinesiología podemos conocer las causas emocionales de los problemas de espalda, tomar conciencia de ello y desbloquear las emociones que están afectando de forma inconsciente. Es una estupenda herramienta de crecimiento personal y toma de conciencia. 👉Para conocer más sobre la Kinesiología

➡️ LNT®: terapia energética y cuántica que permite desbloquear los traumas físicos y emocionales, liberar las fascias musculares, alinear la notocorda o línea media del cuerpo y reajustar las vértebras. Se centra en el equilibrio del cuerpo físico, emocional, energético y espiritual de la persona, ayudando a superar numerosas dolencias como el dolor de espalda. Incrementa además la vitalidad, potencia la intuición, y trata fobias, adicciones e inseguridades. Es una novedosa técnica no invasiva, apta para todas las personas y todas las edades. Con una sola sesión ya se notan sus beneficios. 👉Para conocer más sobre la LNT®


En definitiva, en mi opinión y por mi experiencia todas las técnicas mencionadas son válidas y no existe ninguna mejor que otra; son diferentes y actúan desde distintos niveles, cada una ayuda a equilibrar el cuerpo, mente y emociones desde su particularidad.

Como hemos visto, además de recibir terapia manual también es importante tratar la parte emocional. Podemos recibir un masaje u otra terapia que nos alivie el dolor, pero si no tratamos el origen del problema lo más probable es que el dolor vuelva a aparecer. Con técnicas como la Kinesiología y LNT® nos enfocamos en la causa del dolor de espalda, ayudamos a liberar las emociones que nos bloquean y ofrecemos herramientas para gestionarlas. De esta manera no sólo es posible sanar el dolor, sino que además acompañamos a la persona a realizar un proceso de crecimiento personal. 

Por este motivo, es importante tomar conciencia de la relación que existe entre nuestras emociones y postura corporal. Por ejemplo, cuando nos sentimos decaídos, tristes, faltos de autoestima...tendemos a encoger los hombros y encorvar la espalda. Mientras que cuando estamos alegres y seguros de nosotros mismos adoptamos una postura más erguida. Todas las técnicas de liberación emocional mencionadas pueden ayudarnos enormemente en este aspecto. 👉Para conocer más sobre la relación entre tus emociones y postura corporal

Cabe añadir que la práctica de ejercicios como la natación, el yoga, pilates o estiramientos ayuda en gran medida a aliviar el dolor de espalda, así como mantener hábitos posturales saludables tanto en casa como en el trabajo. 

Espero que este artículo haya sido de tu interés, no dudes en contactarme para cualquier pregunta o sugerencia.